Pausa y retorno.


El viernes me prestó el paseo. Anduve por la faceta de levante. Mucho mar. Me entregué a la preparación de una puesta. Tenía ganas, y confianza, en esa postura.


Até la cuerda de seguridad a un fornido pino. Bajé al límite y comprobé que podía pescar. 


Incluso accioné el vídeo del móvil, pues daba por hecho que algún sargón picaría al instante. Erré, eventualidad a la que he de habituarme en estas zonas. Anfaño proveedoras de buenos ejemplares, su decaimiento es patente.


No obstante fueron momentos deliciosos, por cuanto supone tener la suerte de pasar el tiempo a su vera.


El mar mutò ayer sábado. Ya dejó licencia para intentarlo por las zonas querenciosas. Y no fallaron. Tres puestas y todas me depararon las emociones que todos anhelamos.


Os dejo los vídeos que subí a youtube. Hoy por la tarde quizás lo intente de nuevo.












Comentarios

Entradas populares de este blog